Dicen que a la suerte hay que ayudarla. Y, para eso, todo vale. Hasta las cábalas. El equipo argentino que ganó por primera vez una Copa Davis para Argentina tuvo su ritual y, al parecer, le funcionó. Daniel Orsanic les dio una orden y los chicos, obedientes, la cumplieron.
Argentina llegó a Zagerb con el triste récord de perder cuatro finales en la Copa Davis.
Fue entonces que el capitán Daniel Orsanic decidió pautar una cábala con el equipo para ayudar a cortar el maleficio.
Allí radica el origen de esta foto. Como se puede observar, ninguno mira a la copa. Y eso tiene una explocación: ningún jugador debía tocar la Ensaladera y mucho menos sacarse fotos. Incluso, de ser posible, debían evitar mirarla.
Está claro que la hazaña de Juan Martín del Potro, Federico Delbonis, Leo Mayer y Guido Pella fue por el talento y la unión que mostraron. Pero un granito de arena podría haber sido dado por la cábala del equipo Albiceleste.
(FUENTE: elintransigente.com)
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