El dinero puede comprar la felicidad, pero el amor es el principal responsable de hacer de una persona. La conclusión de un estudio realizado por la London School of Economics, en el Reino Unido, con más de 200 mil entrevistados de Australia, Alemania, Estados Unidos y el Reino Unido.
El estudio se preguntó a los participantes sobre los factores que promueven su felicidad. En una escala de 0 a 10, los voluntarios tenían que responder a el como su nivel de satisfacción con la vida aumentaba o disminuía ante ciertos cambios y el amor salió victorioso. Estar en una relación eleva, en promedio, 0,6 punto en la escala, mientras que tener su salario doblado hizo la tasa crecer un 0,2 punto.
Si ganar más dinero no influyó tanto en la felicidad, perder el empleo ha sido uno de los factores con mayor potencial para reducir el índice de satisfacción. Al lado de los cuadros de depresión y ansiedad, la caída fue, en promedio, de 0,7 punto. Perder a un compañero, ya sea por muerte o separación, disminuía la felicidad en 0,6 punto.
Con base en los resultados, Richard Layard, coautor del estudio, afirma que los gobiernos inviertan más en la promoción del bienestar de la población, que en el crecimiento económico del país. “La violencia doméstica, el alcoholismo, la depresión, la ansiedad y el aislamiento de los jóvenes deben ser el centro de atención de las políticas públicas”, dice en una entrevista a ‘BBC’.
(FUENTE: pysnnoticias.com)
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