Por: Reynaldo Silva Salas.
Una de las consultas más frecuentes que suelo recibir, en lo referente a la aparición ó descubrimiento de elementos de brujería en el hogar, es el referente a la duda acerca de, si quien encuentra este tipo de elementos -reales o no-, si su función sería o no, la de embrujarles en lo afectivo, amoroso ó incluso, sexual; esta frecuente duda se debe, no a que sea más fácil o evidente, detectar si un supuesto trabajo de magia ó brujería, es dirigido con esas intenciones: la duda razonable generalmente se debe primordialmente, a tres factores: uno, el que, quien encuentre estos extraños elementos, por sus características evidentes (flores, velas rojas etcétera), apunte a sospechar que se debe a tal intención. Segundo, por una simple corazonada ó presentimiento, debido a lo que acontece en su vida afectiva,... y en esto, hay que admitir que en la gran mayoría de los casos, las coincidencias no existen y finalmente, la más frecuente de todas: que el elemento de brujería encontrado ó se descubra en lugares de la casa a las que sólo tienen acceso, muy contadas personas -parejas ó ex parejas-, ó hechizos que muestran de manera evidente, que han sido hechos con prendas, fotografías ó incluso cabellos, recortes de uñas,... lo cual hace más que evidente el objetivo, en muchos casos,
En situaciones así, aparece la pregunta de rigor, ¿qué hacer?, pues como esto al ocurrir, lo menos que tenemos a mano es alguien quesea conocedor en estas lides, y que se encargue del asunto, por lo que acá les muestro, un breve resumen de formas de actuar al encontrarse con elementos propios de un embrujo para el amor, realizado en contra de uno:
Primer paso: identificar si lo que encuentra, es un ritual o no
Esto es lo primero que se debe hacer y en este sentido debo ser enfático: no se deje llevar por primeras impresiones; si en la puerta de su hogar, patio, jardín o techo, encuentra algo tan sencillo como una pluma, un polvo no identificado, un charco de un líquido desconocido, un atajo de flores marchitas sin más, la pata de un pollo, en resumen, algo que individualmente,puede interpretarse como casi cualquier cosa ó como algo que bien podría dejar ahi un niño ó un animalito, simplemente descarte de plano que sea un elemento de brujería: un sólo objeto, per se, no es magia ni la ocasiona: en ese caso, tirelo a la basura sin más.
Caso contrario, un verdadero embrujo -y de amor, que es lo que nos atañe en esta oportunidad-, si es del tipo de rituales que la persona debe encontrar para que haga efecto (ya sea para enamorar ó para ocasionar ruptura de una relación de pareja), éste estará integrado por un mínimo de 2 o más elementos, y siempre será de alguna forma, algo "elaborado": tanto para generar amor ó deseo, como para maldecir, los elementos de un ritual deben ser "cargados" con energía, manipulados y modificados en poca o gran medida, por el brujo de turno. Por ende, una persona neófita en estas lides bien puede reconocer su autenticidad en la mayoría de los casos, observando si es que el ó los objetos sospechosos, parecen haber sido manipulados previamente por manos humanas, con una intención clara y evidente, y no solamente son algo que bien cualquiera pudo dejar tirado ahí.
Aclarado este punto inicial, paso ahora a explicar cómo actuar cuando encontramos con verdaderos elementos de brujería, y algunos que, si bien son frecuentes, no tienen connotación mágica.
Líquidos ó polvos esparcidos en la puerta de la casa
Ambos casos, al igual que aceites de cualquier tipo, son sólo muestra de que a alguien no le caemos bien, mas, al ser generalmente de ese tipo de productos "mágicos", que se venden en toda tienda del ramo esotérico ó mágico, y por unas pocas monedas, pierda cuidado. como dije en líneas anteriores, un simple elemento no hace una brujería, y menos, como en este caso, si es un tipo de "magia", que realmente es risible y con casi nulos efectos. Basta con hacer una limpieza convencional.
Flores de cementerio -ó similares-, marchitas
Una práctica muy frecuente para desear el mal (fracaso matrimonial, por ejemplo), pero francamente inútil; se basa en la creencia de que ciertos elementos, que se encuentran en sitios cargados de negatividad, pueden transmitir esas energías nocivas; esto es falso y si usted encuentra en la puerta de su casa, flores de estas características, mas bien sólo debe preocuparse de tener una enemistad fuerte.
Si encuentra un embrujo de amor ¡no haga esto!
Ya entrando de lleno en lo referente a verdaderos embrujos de amor, hay que hacer una aclaración; no los queme, ni tampoco los arroje a un curso de agua corriente (río, mar, acequia, etcétera); esto se debe a que, en el caso específico de los rituales de amor, el quemarlos genera a la vez, que el embrujado no olvide lo que están haciendo y a la vez, lo potencia: en el caso de echarlo a un curso de agua, esto genera que el ritual tenga efecto de manera irreversible; en pocas palabras, estas dos acciones son contraproducentes.
Botellas con líquidos, elementos y fotografías
En este caso recién hablamos de un tipo de brujería amorosa reconocida; en algunos trabajos para "atar" a una persona ó tomar control del destino de un relación de pareja o matrimonio, los elementos usados se conservan en un frasco o botella: a según, unos lo entierran en lugar secreto y otros, prefieren dejarlo a vista del maleficiado(a), para generar miedo y darle así al trabajo, más poder.
En caso de encontrar uno de estos trabajos, fuera ó dentro de su casa, lo adecuado es tomar el frasco no directamente con las manos (máximo, envolverlo en una hoja de papel ó cartulina negra), y meterlo en un frasco más grande, lleno de sal. También puede llevarlo a un conocedor en el tema, para que lo anule.
Muñecos, fetiches ó figuras similares
No sólo la magia vudú usa muñecos ó fetiches: casi la mayoría de las escuelas mágicas; para anular este tipo de trabajos (ya sean amarres ó maldiciones de amor), lo recomendable es tomar el muñeco y meterlo dentro de una caja (de madera ó de cartón, pero con tapa), cual una suerte de ataúd, y dentro de él, coloque 2 espejos pequeños, uno frente al otro (y el muñeco en medio) Finalmente, entiérrelo en un sitio que sólo usted conozca.
Paquetes de tela, envolviendo diferentes elementos
Es, por mucho, una de las presentaciones de un amarre ó ritual de amor, más frecuente de encontrar: generalmente de tela roja, son rituales de magia roja y sexual, realizados para generar el amor ó el deseo sexual,... y no necesariamente a personas que en u sano juicio, corresponderían a quienes lo han encargado. Asimismo, es del tipo de rituales que muy bien puede hallarse dentro de su casa, bien escondidos. La manera adecuada de actuar con este tipo de trabajos, es tomarlos con las manos enguantadas ó en casos de urgencia, inclusive, poniéndose en las manos bolsas de plástico (¡no lo abra!); paso siguiente, envuelva el paquetito con alambre de plomo (puede hallarlo en ferreterías); finalmente, portando un martillo nuevo, lleve el paquetito a un sitio alejado y baldío de su casa: con determinación, descargue 9 golpes con el martillo y déjelo ahí, sin volver la mirada atrás. En este caso, sí es recomendable luego, realizarse un baño de limpieza ó purificación.
"Atados" con ó envolviendo fotografías suyas
Éste es, lamentablemente, el más "popular" y frecuente embrujo de amor: consiste generalmente, en un atado realizado con hilos ó lana de colores -a veces, sólo de color rojo ó negro-, y que dentro lleva, fotografías, cabellos, recortes de uñas y/ó retazos de las prendas de ropa den embrujado y de quien ha encargado este hechizo: es un ritual de amarre en magi negra que busca atar a una persona, en lo afectivo y sexual, aún -y sobre todo-, contra su voluntad, y maldiciendo toda su vida afectiva, si se rehúsa ó lucha contra ese destino.
La forma adecuada de acabar con este trabajo es, cogerlo no con las manos desnudas -puede usar los métodos antes referidos ó hasta unas pinzas u otra herramienta, ya que suelen ser de tamaño pequeño-, ya en un sitio adecuado, tome un vela negra: enciéndala y silenciosamente, deje caer sobre el atado la cera de la vela; tómese el tiempo suficiente como para que se forme una sólida"costra" de cera, que cubra el atado. Déje que se seque y, ya sin riesgo alguno, coja el pedazo de cera con el atado dentro y métalo dentro de una caja de cartón o madera, con una cruz pequeña dentro. Finalmente, entierre la caja en un escampado ó un cementerio. Como en el caso anterior, se recomienda un baño de limpieza posteriormente.
Asimismo, puede luego de deshacerse de estos embrujos, ir donde un especialista.