El monstruo del Lago Ness ha tomado partido en el referéndum de independencia. Es más, su apoyo a la causa de Alex Salmond es tal que ya no se llama 'Nessie', sino 'Yessie', por su prodigiosa capacidad para sacar su cuerpo ondulado y verde de las negras aguas y formar un simbólico 'Yes', gracias al efecto creado por su cola partida...
Ahí le vemos, emergiendo en las camisetas para niños de la campaña separatista de 'Yes Scotland', que se están vendiendo a mansalva como las camisetas de Messi. Con una rivalidad enconada, como la del Madrid con el Barcelona, la campaña unionista 'Better Together' ha puesto el grito en el cielo por la indebida apropiación del mito.
"Es un desacierto esto de recurrir a Nessie, porque en el fondo demuestra que la campaña del 'sí' está ya hundida", alega el laborista Dave Stewart, al frente de Better Together (Mejor Juntos) en las Highlands. "Quizás, lo que pretenden los independentistas es capturar el voto flotante"...
El nacionalista Ken Gowans, portavoz de la campaña de 'Yes Scotland' en la lejana Inverness, a tiro de piedra del legendario lago, defiende sin embargo la idea como "divertida e inofensiva". En declaraciones al North Star, Gowans asegura que su hija de tres años lleva frecuentemente la camiseta y que ha popularizado entre sus amigas al simpático 'Yessie' (de momento se vende sólo por correo).
El disputado voto de Nessie se ha convertido en arma arrojadiza en las Tierras Altas de Escocia, donde el apoyo a la independencia es algo más alto que en Glasgow y Edimburgo y la identidad escocesa se reafirma a pie de calle en el gaélico, la gaita, el kilt y el "agua vida" (o sea, la falda y el whisky).
El quinto e intocable elemento de las imponentes Highlands es el monstruo, cuya leyenda se remonta tiempos inmemoriales. El primer "avistamiento" del que se tuvo noticia fue en el año 565, cuando se supone que San Columbano fue testigo del "gran rugido y la boca desmesuradamente abierta" de una criatura que sembraba el terror en las orillas del lago, y al que sin embargo logró espantar haciendo simplemente la señal de la cruz. Amén.
El 'año del monstruo' fue sin embargo 1933. Desde entonces hasta la fecha han habido más de mil testimonios de otras tantas apariciones misteriosas, ilustradas muchas veces por fotos trucadas como la del cirujano Kenneth Wilson, que aseguró haber retratado a un "plesiosaurio" (sesenta años después se supo que lo que fotografió fue en realidad un modelo flotante no más grande que la palma de su mano).
En 1962 se formó la Agencia de Investigación del Fenómeno Ness, para distinguir la paja del espejismo. Las misiones científicas, desde el Loch Ness Project al descenso del Pequod, se lanzaron luego a la explorar los cañones del lago, que llega a los 180 metros de profundidad, a la busca de pruebas definitivas que nunca se han encontrado.
En el Centro de Exhibición del Lago Ness -esa maravilla de la geología formada en lo que fue un glaciar hasta hace más de 10.000 años- se esfuerzan por poner la ciencia muy por delante del mito. Aunque luego explotan la fotogenia de Nessie en la tienda de souvenirs, donde podemos comprar todas la variantes imaginables del bicho (serpiente, plesiosaurio, dragón, caballo marino) antes de su última y politizada mutación: 'Yessie', el monstruo de la independencia.
(FUENTE: elmundo.es)
No hay comentarios:
Publicar un comentario