La Policía reprimió con gases lacrimógenos y pimienta la celebración del Carnaval de Haití, que con rituales de Vudú organizó en la ciudad de Santiago un grupo de haitianos.
La portavoz del grupo, Dorothie Etienne, dijo que en la fiesta que celebraban en el sector Villa Olimpica de la ciudad norteña, frente a la Universidad Tecnológica de Santiago (Utesa), donde estudian la mayoría de los 300 haitianos participantes, fueron acorralados por la Policía.
Asimismo, indicó que ambientaban la festividad con música de su país, lo que molestó a muchos dominicanos residentes en el área.
Subrayó que a muchos dominicanos, incluido el encargado de la plaza comercial donde celebraban el acto, no le gustó la actividad ni la música que colocaban, debido a que es de otra cultura.
Sostuvo que la Policía irrumpió en el lugar y que sin mediar palabras comenzaron a desmantelar los equipos de música y la escenografía.
"Me echaron gas en los ojos, me apuntaron al pecho con una escopeta y lanzaron bombas lacrimógenas donde estaban todos mis compañeros", comentó Etienne, que estudia medicina.
Varios de los afectados se quejaron este jueves en el consulado haitiano en la ciudad de Santiago y luego se dirigieron a la fiscalía de la Policía Nacional y presentaron una querella en contra de los agentes que actuaron.
Mientras, la Policía dijo que abrió una investigación, pero defendió la actuación de sus agentes, alegando que intervinieron el lugar al recibir numerosas quejas de ciudadanos de que un grupo de extranjeros practicaban rituales satánicos y que colocaban música de adoración al Diablo.
El Vudú es un rito que practica la mayoría de los haitianos, pero en República Dominicana es un ritual desconocido.
Una fuente de la uniformada comunicó que cuando los agentes llegaron, muchos de los haitianos trataron de agredirlos, por lo que se vieron obligados a defenderse lanzando gas pimienta en los ojos a algunos de los revoltosos.
"Ellos tienen que comprender que Haití y República Dominicana somos dos países vecinos, pero cada cual tiene su cultura, sus leyes y sus normas y los ciudadanos de una y otra nación tienen que respetarlas", dijo el oficial superior que conversó con Inter News Service (INS) y que no quiso identificarse.
(FUENTE: almomento.net)
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