En el pasaje Junín es famosa la estatua que, según sus dueños,da números a los jugadores.
Con la esperanza de ganarse la lotería, Fabio León Ortiz le echa 2.000 pesos a una vitrina llena de billetes en la que un Buda dorado, con mirada sonriente, parece prometer un chispazo de suerte y bienestar.
A cambio del acto el hombre recibe, de parte del empleado de la tienda esotérica, -en donde está la estatua- un sobre que contiene dos números de cuatro cifras, con los que Fabio espera ganarse por lo menos una rifa.
"Yo he ganado dos veces, la primera fue hace ocho meses cuando me gané un equipo de sonido con los dos últimos números que me había dado el Buda. El segundo fue hace cuatro meses, me gané un chance de 800.000 pesos", asegura el hombre que no pierde ida a Junín cuando va a hacer alguna vuelta al Centro.
Su afición por el juego lo heredó de su madre al igual que la fe por la estatua de Siddhartha Gautamá, que trae prosperidad a la vida de sus creyentes.
"Hay que ponerle mucha fe para que lo beneficie a uno sino, no se gana", apunta el comerciante independiente mientras observa los números que está vez le recomendó el indio Buda.
Desde que Raúl González, el promotor del Buda, instaló la estatua en la calle Junín este se ha ido ganando la fama del adivinador de los números de lotería, prueba de ellos son varias colillas de chance que los jugadores llevan al negocio para agradecer los favores recibidos.
"Además de los números el sobre contiene un mensaje del budismo para una mejor vida. Hay que aclarar que nosotros no sabemos cuál va a ser el número ganador, lo único que garantizamos es que la suerte depende de la buena energía con la que apueste", explica el numerólogo de 51 años.
Pero al lugar no llegan solo los que quieren ganar: "hay quienes vienen y le echan el billete sin pedir los números, lo hacen porque son creyentes del hombre que regaló toda su fortuna a los más pobres", añade.
Los turistas también se encantan con la estatua. Dentro de la vitrina hay varios billetes de dólares y euros. "Simplemente lo observan, nos preguntan para qué es y se van", dice Fabio.
Para fundación budista
De acuerdo con González más de la mitad del dinero que recolectan con el Buda de Junín es destinado para una fundación en Yopal (Casanare).
"Es un centro budista en el que formamos jóvenes en la religión que enseña a buscar la paz del espíritu", concluye González quien se considera el más fiel de los seguidores del budismo en Medellín.
Por su parte, Fabio espera que este año nuevo la estatua le dé unos cuantos números para continuar la racha ganadora que ha tenido hasta el momento.
(FUENTE: eltiempo.com)
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