Una fuerte controversia se ha desatado ante el anuncio del ministro de Vivienda, Francis Allison, acerca de la reconstrucción, en Pisco, región Ica, del cementerio de la localidad, así como que los restos del personaje popular Sarah Hellen, serán llevados a un mausoleo especial, según informa la prensa.
Según se indica, tras llegar al Cementerio General de Pisco, el ministro anunció la reconstrucción integral del cementerio donde se invertirán aproximadamente 6 millones de soles para cubrir la demolición de 8.000 nichos cuyos restos serán trasladados a nichos osarios.
Asimismo, se señala que "a pedido del presidente del Directorio de la Sociedad de Beneficencia Pública de Pisco, Carlos Luyo Ocejo, y de la población", también serán trasladados a un mausoleo, los restos de Sarah Hellen debido a que el pabellón donde se encuentra su tumba se vio afectada por el terremoto de 2007, y porque muchos fieles acuden a dejarle flores. Los pobladores aseguran que la "bruja, es una santa del amor".
Según la creencia popular, Sarah Hellen fue una británica amante del Conde Drácula. Nació en Inglaterra, y según la leyenda, practicaba la brujería y magia negra. Incluso fue asociada con la adoración a Satanás.
La leyenda también indica que sus vecinos se aprovecharon de una enfermedad para matarla. Sin e mbargo, tras una terrible agonía, juró regresar del más allá, cien años después de su muerte para cobrar venganza. Por temor, sus familiares enviaron su cadáver a Pisco, donde se encontraba su esposo, y en esa localidad fue sepultada.
En abril de 1993, surgió el rumor que por las noches, en los alrededores del cementerio, aparecía una mujer rubia y en bata blanca seducía a los hombres para beber de su sangre. La leyenda decía, que el 9 de junio de 1993, al cumplirse el centenario de su muerte, Sarah Hellen iba a resucitar para cumplir su amenaza.
Como se recuerda, el cementerio de Pisco fue invadido tanto por periodistas como por brujos, chamanes y curiosos. Sin embargo, no ocurrió nada. La leyenda de Sarah Hellen renació cuando a pesar del terremoto, su tumba no sufrió daños.
La controversia se desató debido al hecho que, tras el terremoto que azotó Pisco en 2007, el gobierno aprista al cual pertenece el ministro Alisson, poco o nada ha hecho desde ese entonces por la reconstrucción de la localidad, en la cual aún hoy en día gran parte de la población de Pisco, no cuenta con vivienda, por efectos del antes mencionado sismo, por lo que el anuncio de destinar fondos del Estado para erigir un mausoleo para Sarah Hellen, en vez de resolver las urgentes y desatendidas necesidades de la población de Pisco, y argumentado según palabras del ministro Alisson "por ser un atractivo turístico y objeto de culto popular", fue altamente criticado por la prensa y opinión pública.
Asimismo, dicho anuncio se ha sumado al cúmulo de críticas que ha venido recibiendo el gobierno por la pésima administración de recursos destinados a la ayuda de los damnificados del sismo de 2007, a dos años de haber ocurrido el mismo, que dejó grandes daños materiales y 500 víctimas fatales.
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