miércoles, 30 de septiembre de 2009
La taza de hierro de Wilburton
Hallan restos de arquitectura prehispánica en Apurímac
martes, 29 de septiembre de 2009
Diez adolescentes fueron internadas "por posesión demoníaca" en Colombia
lunes, 28 de septiembre de 2009
La Casa Encantada de Lunahuaná
domingo, 27 de septiembre de 2009
Investigan fenómenos paranormales en una casa vacía de Villa Antonia (Huelva, España)
Aparece un gusano marino que se consideraba extinguido desde 1913
Megan Fox aterrorizada: asegura que los fantasmas la persiguen
sábado, 26 de septiembre de 2009
Lugares embrujados de España: El edificio de Hacienda de Vitoria
viernes, 25 de septiembre de 2009
David Carradine creía que un fantasma vivía en su armario
jueves, 24 de septiembre de 2009
Encuentran "tiburón fantasma" con apariencia rara en aguas marinas de California (EEUU)
miércoles, 23 de septiembre de 2009
El cruce de ferrocarril embrujado
martes, 22 de septiembre de 2009
Descubren un extraño meteorito en el desierto australiano
lunes, 21 de septiembre de 2009
Autoestopistas fantasmas (18); El motorista fantasma de la autopista 29
Los avistamientos OVNI en Gran Bretaña se han triplicado
Filman OVNI al sur de Valparaíso (Chile)
domingo, 20 de septiembre de 2009
Autoestopistas fantasmas (17), La chica fantasma de Petrópolis
sábado, 19 de septiembre de 2009
Mi secreto
Aún recuerdo aquel día, me sentía contenta, pues había estado pensando como organizarme en algunas cosas que me tenían algo preocupada, había encontrado ya la solución y sabía que todo marcharía bien, también estaba más aliviada ya que al fin me había puesto al día con mi trabajo atrasado.
Entonces salí contenta, el haber salido un par de horas antes de la oficina, me dio tiempo
para mirar algunas tiendas, ropa, zapatos, lo que a toda mujer le encanta hacer y bueno ahí estaba, ya era la única que quedaba, la tome en mis manos sintiendo un alivio que ahora si me la llevaría conmigo.
Me fui contenta con mis compras llegue a casa, no sentía hambre así que no comí nada, puse algo de música, ordené algunas cosas, revise mis compras y después de un buen rato me acosté a dormir. y ahí empezó todo, una vez más.....Ya han pasado un par de semanas desde la última vez que me ocurrió y aún siento que no he podido reponerme del todo, me siento débil frágil, sin fuerzas. Ahí estaba yo, en mi cama, de madrugada, después de haber dormido ya de corrido unas tres ó cuatro horas, acostumbro a dormirme de noche y no despertar hasta el otro día. Pero, esa noche, como las experiencias anteriores. Algo, me despertó, sentí su presencia e inmediatamente pensé: de nuevo él. Entró por la ventana desplazándose por los pies de la cama, esto que voy a escribir a continuación es increíble ni yo misma lo entiendo, pero estoy muy segura de que es así, es invisible PERO YO LO VEO!!!!!. no es como mirar un fantasma algo transparente medio borroso, si no más bien como una cápsula de energía que se desplaza tanto así que logro darme cuenta de toda su dimensión tanto de alto como de ancho, hay ocasiones en que se materializa y logro ver su rostro, siempre es distinto, tienela capacidad de cambiar constantemente y ahí esta, no estoy soñando, mis ojos lo están viendo y esto realmente esta pasando estoy muy despierta y lo estoy viviendo.
Intento moverme para protegerme, refugiarme en mi cama, pero ya es tarde, él bloqueo todos mis sentidos, mi cuerpo comienza a acalambrarse solo sintiendo el dolor y no el recogimiento normal de los calambres, puedo sentir todo ese maldito dolor desde mi cabeza hasta mis pies, intento gritar, más no puedo articular palabra alguna, no puedo moverme, el pánico se apodera de mi quisiera esconderme en forma fetal dentro de mi cama, pero mi inmovilidad no me lo permite, siento mucho miedo, Dios mío que clase de ser esta conmigo haciéndome esto, me aterra siento que voy a morir del susto.
No puedo luchar contra él, es muy fuerte. Después de observarme y darse cuenta el miedo que me provoca se acerca justo a mi lado mirándome de una forma desafiante, como si disfrutará mi desesperación. se tira encima de mi, me pesa, me aprieta el pecho, es un hombre puedo sentirlo, me aprieta fuerte casi no puedo respirar, pone su boca rozando la mía siento su aliento frío, comienza a succionar mi respiración como si quisiera sacarme el aire de los pulmones me desespero, pienso que es mi fin que si saca todo mi aire me matara!!!. Desesperadamente trato de rezar mentalmente, pero no puedo, en ese momento no lo recuerdo se que es obra de él, sigo tratando de rezar y me doy cuenta que no puedo armar ni una sola frase de forma correcta, lo cual me desespera más aún, él sigue encima me cubre todo el cuerpo, si bien no siento sus manos tocándome como lo haría un hombre, siento de igual manera que lo hace con cada centímetro de él, le gusta, lo goza, es como si le excitará el miedo que me hace sentir, luego me suelta, comienzo a recuperar todos mis sentidos de poco a poco y el primer halo de aire que logro llevar a mis pulmones me duele como si me hubiera comido un montón de dulces de menta.
Me estoy recuperando, ahora yo presiono mi pecho como queriendo distribuir bien el aire que me esta llegando, él se aleja a un costado de mi dormitorio mirándome de forma irónica. el aire esta pesado, denso, me mira por última vez toma un impulso y sale por la misma parte que entro, por la ventana lo escucho lejos como se va revoloteando por los techos hasta no oír nada e inmediatamente el aire del dormitorio cambia, se limpia, se hace respirable.
¿Quién es? O ¿qué es? ¿Por que a mí? ¿Por que me pasa esto? ¿Quién me puede explicar a quien le pregunto? ¿A un cura? ¿A un psiquiatra?.......Son las preguntas que me vengo haciendo desde hace años, ¿Porque me sigue? Me he cambiado de una comuna a otra y siempre me encuentra como si me tuviera atada a un hilo invisible que le indica el camino hacia mi.
Al otro día me levante completamente pusilánime, todo lo contrario de como había estado el día anterior, me sentía extraña en la ducha comencé a llorar, tanto así que termine arrodillada mientras el agua tibia caía en mi cabeza, lloraba como una niña asustada, ya hartada de todo esto. Siempre que me pasa deseo que sea la última vez y vuelve a ocurrir, curiosamente vuelve a pasar después de mucho tiempo de la última vez, es cuando ya casi lo he apartado de mi mente y mi vida, cuando ya casi lo he olvidado (no del todo, algo así no se olvida nunca), pero cuando ya no le doy la importancia de los primeros días.
Lloré hasta quedar más aliviada, antes cuando ocurría, lloraba de miedo, ese día lloré de desesperación estaba tan abatida que pensé y que pasa si voy al psicólogo, pero inmediatamente me di cuenta de como le empiezo a contar, que experiencia le cuento primero, no me creerá, ellos no creen, pensará que estoy desarrollando algún tipo de "esquizofrenia deprimida", me dará algún nombre raro de esos que usan ellos e inmediatamente lo descarté.
Me fui a la oficina como suspendida en el tiempo veía todo distinto, anduve todo el día con mi mente en lo que me había pasado en la noche, luego en la tarde cuando me fui, hice el mismo recorrido que había hecho el día anterior, tan contenta, pero ahora con el animo completamente distinto, miraba a la gente pasar al lado mío y me sentía como bicho raro, extraña que no era como ellos, sentía que era distinta porque a esa gente no le pasan estas cosas, al parecer se me refleja bastante en el rostro, cambia hasta mi semblante, algunos compañeros me preguntan que me pasaba y solo decía que estaba cansada. como decirles "es que por las noches me visita un demonio o un ser extraño que me toca, me absorbe" porque es esa la sensación que me deja por días, semanas, meses, siento que se lleva mi energía, mis fuerzas, mi vitalidad, después de esos ataques me siento cansada, mal humorada, enferma e insignificante.
Llevo ya más de diez años teniendo experiencias como esta, aunque suene absurdo creo conocerlo más, el miedo sigue siendo exactamente el mismo cuando siento que viene, pero ahora lo he enfrentado conozco sus movimientos, su forma de actuar siempre repite los mismos pasos en orden, el ser que sea -sé que es de sexo masculino-, es un ser poderoso, inteligente. Si bien, no quiero darle tanta cabida a él en mi mente es inevitable que cuando me estoy quitando la ropa para dormir no piense ¿vendrá esta noche?, Quisiera que llegue un día en que me acueste sin pensar en la posibilidad que esta noche puede venir.
(COLABORACIÓN DE: Natalia, de Santiago de Chile)