Desde las 05:30 horas arribó el convoy, muy sobrio y discreto, de los duques de Cambridge, Catherine y William, al Hospital St. Mary´s, en Paddington, en donde se observan 150 metros de barreras metálicas con una multitud de corresponsales y sus equipos que siguen llegando de todas partes del mundo.
Aunque se registra una intensa ola de calor, algunos han estado acampando durante los últimos 10 días.
La fecha programada para el posible nacimiento del primogénito de Catherine y William era el 13 de julio, hace 10 días. Cabe mencionar que esta misma yuxtaposición la decidió hace 31 años la princesa Diana, para ella darse tiempo y dar una "mentira blanca" a los medios de comunicación. Por lo que se cree que el príncipe William llevó a cabo la misma treta.
Una vez concluido el parto, será decidido cuánto requiera la duquesa permanecer en el hospital, que podría ser uno o varios días. Si todo sale normal, hasta este mismo día abandonaría el hospital.
Se sabe que Kate eligió tener a su bebé bajo hipnosis y el príncipe Guillermo asistió con ella a las clases. Incluso se dice que el príncipe Guillermo le puede dar un masaje y la está calmando; ella ha tomado agua de coco, que se recomienda a las mujeres preñadas.
Ninguno conoce el género del bebé. La bisabuela, la reina Isabel II, al igual que sus familiares más cercanos por ambos lados, serán contactados por el príncipe Guillermo de manera personal vía telefónica celular.
El resto del mundo tendrá que esperar una carta firmada por los médicos y ginecólogos, lo que se llama "noticia del nacimiento", que lleva la hora del nacimiento, el peso, sexo y medidas del bebé.
(FUENTE: diariocambio.com.mx)
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