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jueves, 19 de abril de 2018

Historias paranormales en el teatro Odeón desde el Bogotazo


“Las luces a veces se apagan cuando comienzan las obras de teatro, la gente piensa que es parte de la muestra pero en realidad no sabemos por qué pasa eso” comenta Tatiana Rais, la directora de Espacio Odeon, acerca de los episodios que han detectado los empleados de este edificio cultural en los últimos años.

Durante el caos que la ciudad vivió en el Bogotazo, el 9 de abril de 1948 -cuyo aniversario se conmemora este lunes-, el entonces teatro Odeón se encontraba cerrado al público, según cuenta Camila Echeverría, miembro del colectivo Detour.

El edificio histórico, ubicado sobre la calle Jiménez con carrera quinta, en el centro de Bogotá, a tan solo unas cuadras del lugar en donde fue asesinado el líder político Jorge Eliécer Gaitán, "fue posiblemente utilizado por la morgue para ubicar los cadáveres dentro del lugar mientras se arreglaba la ciudad" en los días siguientes al magnicidio, explica Rais.

Más allá de cualquier posible especulación, hay indicios claros: al hacer la remodelación del teatro en 1963 para adaptarlo y renombrarlo como Teatro Popular de Bogotá (conocido también como el TPB), se encontró una cantidad de huesos que serían restos de personas que murieron en el Bogotazo, según le mencionó un informe del DAS a Jorge Alí Triana, quien entonces asumía la dirección del TPB.

Desde entonces, en las sucesivas remodelaciones de este espacio que ha atravesado por varios cierres temporales, son los obreros quienes han recogido muchas historias. 

“Una vez, en la madrugada, en los sótanos del edificio, por ahí a las 3 a. m., un obrero encontró una vela prendida en una de las escaleras”, recuerda Rais. Y en otra ocasión, durante la obra de teatro ‘13 sueños’, uno de los televisores que se necesitaban en la obra se desconectó.

Sin embargo, la historia que realmente sorprende a la directora es cuando hicieron la primera exposición de arte en mayo del 2012, luego de su reapertura como Espacio Odeón. 

“La pieza era una escultura de mármol pesada que estaba encima de una foto. Al siguiente día, encontramos el mármol en otro lugar y la foto estaba en el piso”, explica.

Testigo de la historia bogotana 
El teatro Odeón ha presenciado la construcción de la ciudad. El lugar era estratégico incluso desde antes de la llegada de los españoles: era un lugar importante para los muiscas porque estaba al lado del cauce del río. 

Primero, fue una casa colonial. Mucho tiempo después, en 1939, se convirtió en una de las primeras salas de cine del país. 

Para ese mismo momento, la comunidad judía utilizaba el espacio para realizar sus celebraciones. Se mantuvo mayoritariamente entre ser un espacio teatral y un cinema.

Una limpieza espiritual
Hace cinco años, y ante la incidencia de episodios, Rais encomendó realizar unas “limpiezas espirituales” de las instalaciones. Aunque las historias son en parte sólo eso, historias, fue suficiente como para que el teatro tomara la decisión de hacer estos ejercicios. 

La directora recuerda que quien realizó estas limpiezas aseguró que había encontrado señales de lo que dejó el Bogotazo en el edificio. Sin embargo, la energía propia del lugar se debe también a su pasado y al lugar estratégico que representa en la ciudad.

Hoy, el Espacio Odeón se ha convertido en uno de los lugares más destacados para albergar exposiciones de arte temporales y 'performances'. La programación, que se extiende por todo el año, hablará de su relación con el pasado y el significado del Odeón en la capital.

(FUENTE: eltiempo.com)

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