Que las nuevas generaciones estemos cada vez menos interesadas en temas religiosos no significa que no queramos creer en nada. La prueba está en Japón, donde ni siquiera ha pasado un semana desde que Pokémon Go se estrenara y ya ha generado su primera leyenda urbana inverosímil.
El juego de realidad aumentada ha fusionado de tal manera realidad y realidad virtual que ha actualizando nuestra forma de entender el mundo tangible tanto como el de las cosas que no vemos. Siendo así, algunos ya no se conforman con cumplir su sueño de infancia de ser entrenadores Pokémon a través de un simple videojuego… y han empezado a buscar cualquier señal que les ayude a creer que los Pokémon existen de verdad.
Muchos japoneses están alertando en internet de que sus mascotas (las reales) son capaces de ver a estos monstruitos sin necesidad de una pantalla de móvil, un poco a la manera de los viejos mitos según los cuales los animales son capaces de ver fantasmas o incluso oler a la mismísima muerte.
Para demostrarlo, los usuarios postean en Twitter presuntas pruebas gráficas en las que se ve cómo sus gatos y perros miran en la misma dirección en la que se supone que hay zubats y goldeens salvajes.
Probablemente, una explicación mucho más plausible sería que los animales simplemente miran en la misma dirección en la que ven a sus dueños apuntar con el móvil. O incluso, simplemente, mera casualidad.
Aunque, para qué negarlo, hace de la Tierra un lugar mucho más bonito pensar que, en algún sitio, hay un Pikachu pellizcándose los mofletes o un Charizar dispuesto a batirse con Dios.
(FUENTE: playgroundmag.net)
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