domingo, 26 de febrero de 2012

Un ascensor para ir al espacio



Esta semana la prensa japonesa dio a conocer una noticia que podría iniciar un nuevo capítulo en la historia de la exploración del cosmos: la construcción del primer ascensor espacial del mundo.

Según anunció la compañía constructora Obayashi Corp, pretende construir un elevador que alcanzaría una altura de 96.000 km, un cuarto de la distancia existente entre la Tierra y la Luna.

No se trata sólo subir al espacio para disfrutar de las vistas, sino de crear una "terminal espacial" donde se instalarían laboratorios, espacio para vivienda y desde donde se podrían lanzar nuevos satélites, ahorrando considerablemente el costo de este tipo de operaciones.

El "ascensor"

Hace tiempo que se viene hablando seriamente de un proyecto que nació como un cuento de ciencia ficción.

El proyecto contempla emplear una nave espacial para subir al cielo un cable hecho a base de nanotubos de carbono que conecte el planeta Tierra con una estación espacial. Estos cables estarían fijados al suelo y un "ascensor" de seis compartimentos, capaz de transportar a unas 30 personas, subiría trepando por él a una velocidad de 200 km/h, tardando unos siete días en llegar a su destino final.

Pero antes se detendría en una terminal situada a unos 36.000 km de la Tierra, donde se quedarían los turistas, el resto del viaje estaría reservado para investigadores.

Ahorro

El ascensor, explicaron, emplearía motores magnéticos y se alimentaría con energía solar generada por paneles colocados en el espacio.

Según la compañía, la construcción daría comienzo en el año 2025 y se estima que estaría listo en 2050. Todavía no manejan un presupuesto concreto.

Se cree que la construcción de un elevador semejante podría abaratar enormemente el coste de los viajes espaciales, ya que no requeriría combustibles fósiles.

Un sueño

Ya en 1895, el científico ruso Konstantin Tsiolkovsky, inspirado en la Torre Eiffel, predijo la construcción de un elevador de este tipo.

La idea era usar la fuerza centrífuga resultante de la rotación del planeta. Sería como una cuerda atada a una pelota de fútbol que se hace girar.

Uno de los elementos que permitiría este milagro es el uso de cables hechos a partir de nanotubos de carbono, según explicó a BBC Mundo Nicola Bonini.

"Los nanotubos de carbono son muy fuertes, pero al mismo tiempo son muy ligeros", señaló.

"Un nanotubo es esencialmente una pieza de grafeno enrollado y tiene unas características que lo hacen más resistente que el diamante".

Se estima que este tipo de material puede soportar una carga de 30 toneladas por milímetro cuadrado.

La carrera del ascensor

Centros de investigación de todo el mundo llevan casi una década tratando de diseñar el modo de hacer funcionar un elevador espacial.

En 2009 la Agencia Espacial Europea (ESA) mostró su propio prototipo en la Segunda conferencia Internacional de Diseño del Ascensor Espacial.

Por su parte la NASA en Estados Unidos, hace años que organiza competencias para fabricar las varias partes necesarias para la construcción de un elevador semejante.

Obayashi

Todavía se desconoce como Obayashi Corp. va a resolver uno de los mayores obstáculos en un proyecto de tal magnitud, pero aseguran que ya cuentan con la tecnología suficiente para ello.

"Nuestros expertos en construcción, clima, comportamiento del viento y diseño dicen que es posible", dijo a los medios un portavoz de la compañía.

Obayashi es una de las mayores constructoras del país nipón y dice haberse inspirado en la reciente construcción de la torre más alta del país, la Tokyo Sky Tree de 634 metros.

Esta torre servirá como una antena de emisiones digitales, así como punto de visita turística.

(FUENTE: bbc.co.uk)

No hay comentarios:

Publicar un comentario