Kenneth Rose, biógrafo de la familia por décadas, en su diario relató que la Reina Isabel II durante el verano del 2001 llevó un párroco al Castillo de Sandrigham, donde falleció su padre el Rey George VI a causa del cáncer de pulmón, para realizar una sesión espiritista pues vivía aterrada por el supuesto seguimiento de un fantasma, el cual resultó ser el de Lady Di.
Según los informes la monarca británica desde el fallecimiento inésperado de la Princesa de Gales sentía temor ya que aseguraba que había algo siguiendola y que no la dejaba en paz por lo que decidió llevar a un párraco para que realizará una sesión y liberarse de los malos espíritus.
El párroco caminó por todas las habitaciones del castillo y en efecto, sintió una fuerte de energía de falta de paz en una de ellas", explican en el libro que se publicará en base a los diarios del biografo.
Isabel II pensó que se trataba de su padre quien falleció en el castillo a causa de su terrible enfermedad, sin embargo, el padre le dijo que no ya que se trataba de un espíritu que murió en situaciones violentas, como su nuera Diana que falleció en un accidente de auto, de lo cual fue culpada la reina de 93 años.
"El párroco procedió a realizar el servicio en la habitación. No fue un exorcismo, porque no se trataba de un espíritu maligno. Lo hicieron para traer tranquilidad. Las tres mujeres que participaron tomaron la comunión y rezaron, además, por el descanso del alma del Rey, que había muerto en esa habitación".
(FUENTE: tribuna.com.mx)
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