En China , un ciudadano encontró una salamandra gigante nadando de lo más tranquila en un río en la ciudad de Heyuan, provincia de Guangdong. Asombrado la sacó del agua por unas horas, le tomó unas fotografías y luego la devolvió a su entorno natural. Esto lo hizo sin saber que tuvo entre sus manos al ejemplar más antiguo que existe en el mundo.
Esta salamandra tenía una medida de 83 centímetros y peso de 5.5 kilos, según pudo comprobar el señor Xiao, desconociendo que se trataba de un ‘fósil viviente’, que permanece inalterado desde el tiempo de los dinosaurios y afronta un serio peligro de extinción.
Incluso este ciudadano pudo pasar un mal, pues la cacería de este animal está totalmente prohibida por el Estado, al igual que su ingesta, que puede acarrear penas de hasta diez años de prisión.
(FUENTE: peru.com)
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