lunes, 2 de junio de 2014

Amor: Cuando llega ese dolor fantasma


La bloguera Soltérica Ibérica habló hace poco sobre el dolor fantasma o despecho eterno.

Es esa melancolía o despecho que viene y va, aparece y desaparece, quizá producto de una relación del pasado, de un amor viejo, de alguien que se fue hace tiempo.

La bloguera se pregunta, por qué de un momento a otro, una noche cualquiera, aparece ese recuerdo y llena el espacio de dolor.

¿Será que no se ha perdonado? ¿Será que se ama aún? ¿O será envidia porque esa persona aparentemente siguió con su vida “perfecta” mientras usted se quedó en el mismo lugar o no encuentra una persona que le haga sentir mariposas en el estómago y quiera quedarse a su lado? ¿Desde el punto de vista de los psicólogos será un duelo no resuelto?

Precisamente para no llorar un viejo amor, para saber cómo recibir esos recuerdos y simplemente hacerles una lectura sana, para no devolverse al pasado una y otra vez, los profesionales consultados abordan el tema del dolor fantasma.

¿al pasado?

Como nada me mueve, que me mueva el pasado.

Hay quienes afirman que es muy aburrido ir por la vida sin sentir, así sea despecho por la ex pareja. Que no se mueva nada dentro, que dé lo mismo escuchar una canción de amor que una de desamor, que no haya a quien pensar, que no haya a quien recordar, puede ser el motivo que lleve a las personas a llorar su pasado, a recordar cómo disfrutaban esos domingos de arrunche, así hayan pasado más de 200 de ellos.

Y es que para la bloguera Soltérica Ibérica, la forma en que se iría ese dolor fantasma sería con una vivencia nueva, o con un nuevo dolor.

“Yo creo que en este caso lo que hay que hacer es esperar a que duela algo más, algo que esté vigente, que sea presente y verdadero, algo que uno pueda controlar”, enfatizó la bloguera. O como decían las mamás “tenga pa’que llore de verdad por algo”.

Tal y como se analiza, el dolor fantasma surge de la soledad.

“Al no tener con quien compartir eso que se quiere dar a otro, la persona puede volver a su pasado”, indicó la psicóloga Constanza Camacho.

Por supuesto es importante que abra su campo visual, que siga conociendo personas, pero si no se está preparado, es posible que caiga en un peligroso cuadro comparativo.

“Sí, la idea es que las personas abran su mente, su campo visual, que gocen diferentes experiencias, pero no es recomendable entrar en la dinámica de “él me hacía sentir esto”, “ella era más especial conmigo”. No se puede convertir la nueva persona en un buen recuerdo de la otra”, aclaró Camacho Castillo.

Preguntas a hacerse

¿Le duele algo que no existe? ¿Extraña a alguien que se fue hace rato? ¿Siente amor por alguien que no está? Y después de esa sensación, de recordar sus canciones, sus frases, sus sonrisas, que se quedaron congeladas al parecer después de cinco años en su mente, ¿Le da rabia? ¿Le da pena con usted mismo por sentir eso? ¿Cómo abordar esa situación? ¿Cómo resolverlo para que no quede como irracional, patética, entre sus amigos o amigas?

Seguro no lo contará a los cuatro vientos, es un secreto que si puede se llevará hasta la tumba, pero aún así le basta con la sensación que queda dentro de usted, por sentir que llora a alguien que ni siquiera la recuerda, o si la recuerda, es solo parte del pasado.

Pero lo importante no es que se lleve el secreto hasta el último día de su existencia, sino que sepa cómo resolver, saber por qué no deja ir ese dolor.

Aquí lo importante es que use esa pena a su favor. Claro, si le da pena es porque sabe que no está nada bien pensar en alguien que se fue hace años.

“Si ya se está sintiendo esa pena es porque se está al otro lado, entonces lo mejor es reírse, así sea a carcajadas de ese comportamiento. Es utilizar eso a favor”, enfatizó la psicóloga Constanza Camacho.

La profesional invita además a no quedarse callada. Contarle a las amigas puede ser liberador, quizás estará la que justo está disfrutando una relación maravillosa y se aterrará de la situación, estará la otra que asuma la actitud de sorpresa y regañe diciendo: “por favor, qué haces pensando en eso” y estará la que esté evidenciando lo mismo. Lo importante es no reprimirse sino reírse.

Hace frío, fin de semana solo y llega el recuerdo

Este panorama quizá se convierte en el contexto perfecto para que llegue el dolor del pasado.

Lo importante no es que llegue sino saber qué hacer cuando aparece, y tener claro qué no hacer.

La principal recomendación de la psicóloga Constanza Camacho es no caer en el masoquismo, no llamar más el dolor. “Nada de revisar redes sociales, ni ver fotos, ni revisar estados. Lo mejor es acudir a técnicas de escape como verse linda, irse al gimnasio, arreglarse el cabello, hacerse las uñas, ocupar la mente”.

A las más pesimistas las invita a pararse de la cama y hacer algo. “Arrojar ese estado a la basura y ponerse una curita, en el caso de que la herida no sea profunda, y decir, es un recuerdo bonito, agradable, no tiene por qué doler. Salir del suspiro eterno y doloroso y pensarse emocionalmente inteligentes. Es decir: “esa persona no está y debo seguir, debe comer, vivir, y avanzar”, enfatizó la psicóloga Camacho Castillo.

¿Es ego?

Para algunas personas no es amor. Es solo rabia al pensar que esa persona lo logró mientras ella o él siguen solos o sin una nueva ilusión.

Al respecto explica la psicóloga Constanza Camacho que “seguramente ver que la otra persona baila y goza mientras ella o él están solos puede ser la razón. Y por lo general ese recuerdo viene acompañado de frases como “¿por qué me mandó al carajo? o “¿cómo pudo hacerme eso?”.

Camacho recomienda salir del estado de las preguntas, del reproche y dejar de pensar por qué simplemente lo logró con otra persona y no con usted.

“No debemos dejar de lado que el amor es un ciclo y a veces se acaba más rápido para el otro y hay que vivir ese duelo. Lo que sucede es que se quiere llorar solo un día y que pase esa sensación de inmediato, para estar al otro día con alguien más y así no es”, agregó la profesional Camacho.

(FUENTE: vanguardia.com)

No hay comentarios:

Publicar un comentario