A pesar de que las personas se siguen amando, casando y prometiéndose amor eterno, las estadísticas en el mundo occidental revelan que los divorcios aumentan a mayor velocidad que el número de bodas que se celebran, todo ello como consecuencia de los nuevos modelos sociales que impiden a la pareja conocerse más a fondo y aprender a convivir.
Las parejas no suelen durar mucho en la actualidad, cada día es mayor el número de ellas que toman la determinación de romper esa relación que un día les unió con el propósito o la intención de estar siempre juntos. Las consecuencias sicológicas en una ruptura no suelen ser agradables y provocan dolor, tensión o, en ocasiones, violencia..
Sin duda, que una pareja tome caminos diferentes supone un gran cambio en la vida. Hay despedidas con llanto, otras con una gran sonrisa. Un adiós amistoso es lo mejor y tan cordial es el de algunos que incluyen freno y marcha atrás..
La monogamia es una de las bases sobre las que se asienta la cultura occidental, aunque cada vez hay más voces que la cuestionan. Los investigadores Christopher Ryan y Cacilda Jethá desmontan cualquier convención sobre la sexualidad y destacan que las restricciones son contrarias a nuestra naturaleza..
Los humanos somos promiscuos y polígamos, pero esto no implica que nuestro comportamiento sexual sea arbitrario, sino que derivaría en varias relaciones sexuales paralelas si no contáramos con restricciones sociales..
También existen extrañas razones como: mamitis aguda, una pareja que ronca mucho o acabando con el mito de que el tamaño no importa, las parejas actualmente han trasformado el verdadero significado del matrimonio..
Sin embargo sea cuál sea el motivo y antes de acabar con una familia trate de comunicarse con su pareja o intente solucionar los problemas con la asesoría de un profesional..
(FUENTE: vidayestilo.terra.com.pe)
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