En Misiones, Argentina, un hombre que viajaba en un colectivo dijo que sintió olor azufre y comenzó a gritar, porqué según él, veía fantasmas. Luego de unos minutos, destrozó una ventanilla del interno de Crucero del Norte que se dirigía de Iguazú hacia Buenos Aires, se arrojó desde lo alto y luego escapó corriendo. El hombre fue identificado como Eduardo Rubén Toribio (35) y el insólito hecho se registró en un viaje del interno 1069.
Sobre la avenida de tránsito pesado en Eldorado, el pasajero que viajaba en el piso superior comenzó a golpear y rompió una ventana. El chofer detuvo la marcha y el hombre se arrojó desde la altura.
Al caer, empezó a correr gritando que lo perseguían fantasmas y que sentía olor a azufre. Después de unas horas, la Policía lo encontró en un monte a la vera de una avenida a metros de ruta 12.
Los uniformados trasladaron al convulsionado pasajero a la comisaría Primera para ser atendido por el médico policial, quien determinó que padece un cuadro depresivo y debe ser medicado.
(FUENTE: elintransigente.com)
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