miércoles, 3 de julio de 2013

Argentina: Un nuevo ataque del chupacabras mantiene en vilo a Los Pirpintos


La sucesión de ataques a animales de corral en esta localidad mantiene inmersos a los pequeños productores en la impotencia y abre un abanico de explicaciones sobre qué especie es autor de ese depredador accionar.

En la noche del lunes y en una casa del barrio Quilmes, el “almamula” o “chupacabras” dio muerte a dos cerdos y dejó un panorama desolador, con vísceras desparramadas y huesos de mandíbulas limpios, como si los hubiesen hervido.

La Policía local no lograba dilucidar que ataca y da muerte a animales y recolecta pruebas que son enviadas a la Jefatura Central, mientras proliferan los comentarios sobre los misteriosos ataques.

Para algunos es obra de un ser propio de las leyendas santiagueñas, mientras que para otros se trata de un perro salvaje, que tiene similitud con los restos de lo que sería un “chupacabras” encontrado en cercanías de Quimilí.

Visión de guardaparque

Consultada la guardaparque del Parque Nacional Copo, Eliana Alzogaray, sobre los restos del extraño animal encontrado en el departamento Moreno, expuso: “A pesar de haber visto la imagen en EL LIBERAL superficialmente concuerda que se trata del cráneo de un jabalí lo encontrado cerca de Quimilí”.

Anteriormente, había trabajado en el Parque Nacional El Palmar (Entre Ríos), donde participó en un proyecto para controlar las especies de mamíferos exóticos que habían proliferado en la reserva.

Recién llegada al país, luego de perfeccionarse en Tailandia, Alzogaray comentó: “La finalidad era minimizar la población y realizar una investigación científica y dentro de ésta se hacían estudios para poder conocer más sobre conductas y alimentación. Uno de los aspectos era estudiar los cráneos de los jabalíes. La actividad que realizábamos era hacer hervir estas cabezas para lo que extraíamos toda la carne para dejar solamente el cráneo para ser estudiado en la Universidad de Buenos Aires”.

“Cuando yo vi las fotos publicadas en EL LIBERAL -continuó- por las características que estaba acostumbrada a ver en el jabalí, me pareció que es el cráneo de un jabalí por el diámetro, el pelaje de color negro y las piezas dentarias”.

(FUENTE: elliberal.com.ar)

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