Las opiniones en torno al rostro o imagen descubierta en el tronco de un frondoso árbol de cedro, por un niño de 10 años de edad, de la aldea Las Vegas, de comunidad de Victoria (Honduras), y que LA TRIBUNA hizo público, ha provocado que varios sectores, no solo enfrenten el dilema de creer si la imagen es verdadera o sencillamente un capricho de la naturaleza, al extremo que esperan que el tiempo dicte la realidad.
Y es que mientras los lugareños se debaten entre lo que consideran real y de mucha fe, otros aseguran que es cuestión del Lucifer, e incluso, que son ilusiones de la misma madre naturaleza.
Sin embargo, como todo aquello que tiene que ver con la fe y creencias de los pueblos, las iglesias han reaccionado, tanto la Católica que a través de sus representantes aseguran que se debe ser cuidadoso antes de verter algún tipo de criterio; mientras que sus similares Evangélicos advierten que lejos de ser cosas del Altísimo, son situaciones demoniacas.
Al respecto, el vicario de la parroquia Inmaculada Concepción de Victoria y Sulaco, Manuel Cubilla, dijo que la imagen la ha visto solo a través de fotografías, y que en lo personal prefiere dejar que el tiempo haga su trabajo. “La vida nos enseña a que estas cosas hay que dejar que pasen”.
En ese sentido, el cura indicó que “una vez que las aguas se asienten y la curiosidad haya pasado, tendrían que ver de qué se trata y si es genuino, “y veremos cuál sería el compromiso a que nos invita el Todopoderoso, porque la fe no solo es asunto de ir a ver que nos quiere decir Dios, sino la responsabilidad que conlleva”.
En torno a la imagen, el religioso dijo que “tiene que ser muy cuidadoso, ya que no cualquier cosa es expresión de Dios; en ese sentido uno tiene que esperar a ver qué es lo que pasa, pues lo que es del Todopoderoso permanecerá y lo que no, pasará”.
Considera que “la feligresía no tiene que confundir siluetas o sombras con una realidad mayor, es decir con Dios”.
En lo personal, acotó que “parece que es una silueta que se diluye mientras uno se acerca a la imagen, y medio se nota más, cuándo usted se aleja, por lo que creo que hay un poco de imaginación en toda esa situación; es decir, no es clarita o evidente que hay un mensaje”.
Refirió que en ocasiones estas son formas de encontrar una expresión de Dios en medio de la naturaleza.
Aunque el religioso, con un tanto de escepticismo, dijo que habría que esperar, también comparte la opinión de algunos feligreses que consideran que “en estos momentos de violencia, la imagen aparece en el camino que conduce hacia el cementerio, como una señal de consolación para aquellos que por a o b razón, han perdido a sus familiares en hechos trágicos”.
“Si eso es del Todopoderoso, vea bien donde está el camino al cementerio, en un país donde hay tanta violencia, Él parece consolándonos en esa calle hacia el camposanto, lo que me parece una explicación atinada”.
Recalcó que una cosa es la curiosidad y otra la fe, siendo esta última la que conduce a las personas a luchar por la vida y el respeto a la misma; sin embrago, la curiosidad no nos lleva a nada, por consiguiente, eso que se ve debe comprometer a la gente a defender la vida de todos.
Entre tanto, el pastor de la Iglesia Cruzada del Evangelio, Luis Maldonado, advirtió que este tipo de cosas son creadas por el enemigo –Satanás el adversario”– el cual pone tantas cosas en el camino del hombre para hacerlo pecar.
Aunque confesó que cada ocho días transita por la polvorienta calle, que está frente al predio donde está plasmado, en un árbol, el supuesto rostro, lo único que observa de largo es una posible figura con ojos, cara, nariz, corona, la cual, al acercarse se desvanece.
Considera que el enemigo, a la gente que no conoce de Dios, le hace ver cosas que al acercarse pareciera que son ciertas, pero en lo personal, no hay nada ahí”.
Recordó que en Mateo 23, la Biblia, habla de señales, las cuales son que la Luna se convertirá en sangre, el Sol no dará más su resplandor, que las estrellas caerán, y una de las señalas es que el Hijo de Dios viene en las nubes, a un encuentro con la iglesia que haya vivido en santidad.
Dijo que aquellas personas que visitan el sitio, no han leído la Biblia, ya que estas creen en lo que es idolatría (creen en imágenes); dando como ejemplo lo descrito en el libro de Salmos, el cual reza que “estas personas tienen manos más no palpan, tienen nariz más no huelen, tienen ojos más no ven; semejante a ellos son los que lo andan”.
Consideró que el enemigo confunde a toda la gente que cree en ese tipo de hechos, no así aquella que ha conocida a Jesucristo como único salvador.
Pese a las declaraciones de ambos religiosos, los devotos aseguran que la imagen es para recordar que existe Dios y que estos momentos de inseguridad, Él es el único que puede guiar al pueblo hondureño a la paz y tranquilidad que anhela.
(FUENTE: latribuna.hn)
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