Julio Acevedo vecino de la comuna de Calle Larga, en la provincia de Los Andes, afirmó que el mítico “Chupacabras” hizo de las suyas durante la madrugada del viernes 8 de abril.
Según él, a eso de las cinco de la mañana, se levantó porque tenía que ir al médico, pero cuando salió al patio divisó un ovni en forma de boomerang que flotaba sobre su gallinero. Horas después revisó el sitio y se percató que todas sus aves yacían muertas.
"Imagínese lo que me impresioné al ver un OVNI en forma de V a unos 60 metros sobre el gallinero... pero apenas estuve afuera, se fue volando rápidamente", contó Acevedo al diario La Cuarta.
Su impresión fue aún mayor luego de ver los restos de sus 30 animales que mostraban signos de haber sido perforados en sus gargantas: "Nosotros estamos medio acostumbrados a ver este tipo de cosas en el cielo, así que me fui al doctor y al volver como a las nueve, fui a darle de comer a las gallinas y me encuentro con que estaban todas muertas, así como si les hubieran chupado toda la sangre", relató.
Los cadáveres de las aves no presentaban ningún rastro de sangre y Acevedo no se explica cómo se produjo esto pese a que el gallinero se hallaba cerrado con cadena y candado: "Nadie sintió nada. Mi hijo vive a unos 6 metros del gallinero y como a las 2 de la mañana oyó unos pasos, pero no vio nada. Me da la impresión de que pueden ser seres de otro planeta. O el Chupacabras, no sé", afirmó.
No es la primera vez que sucede algo parecido en Calle Larga. Hace unos cinco años, un vecino descubrió 12 ovejas muertas con los mismos hoyos en el cuerpo, y hace dos, otro también perdió a sus gallinas de la misma forma.
La noticia voló rápidamente hasta los oídos del alcalde de esa localidad, Nelson Venegas, quien fue a ver qué había sucedido. "Soy súper escéptico e incrédulo con estas cosas, pero desde la seriedad de mi cargo puedo afirmar que había animales muertos en circunstancias extrañas y no habían signos de que se los quisieran robar o que haya sido un animal".
Versión del SAG
De acuerdo al Servicio Agrícola y Ganadero (SAG), el principal sospechoso de este asesinato múltiple es un quique, un animal parecido a la comadreja, que se esconde entre los matorrales y se alimenta de aves.
Nota: Lo que este organismo no ha explicado muy bien es cómo un animal tan pequeño se las ingenió para abrir el gallinero cerrado con cadena y candado y por si fuera poco, no comer nada de carne y solo chupar sangre hasta dejar secas a sus 30 víctimas...
(FUENTE: quintainterior.cl)
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