lunes, 27 de julio de 2009

San Juan y Miraflores embrujado



Poco queda ya de los campos de batalla de la Guerra del Pacífico (1879-1884); al menos, en su apariencia original, pero lo que sí ha quedado, es los testimonios de presencias fantasmales en los sitios en los que mucho dolor y sufrimiento tuvo lugar. Uno de estos lugares históricos, donde los reportes de presencias del pasado son constantes, es en los antiguos campos de las batallas de San Juan, Chorrillos y Miraflores, hoy engullidos por la Gran Lima.

Dar como en otros Post, una ubicación precisa de los lugares de las apariciones, nos es en este caso, imposible: dichas batallas se dieron lugar en frentes de más de 6 kilómetros de largo cada una, por lo que las apariciones relacionadas a estos aciagos sucesos se reportan en un área geográfica muy grande, la cual fue principalmente urbanizada a partir de la expansión urbana de la capital, a partir de los años ‘60s.

En este Post recogeremos algunos de los relatos más importantes y destacados, con respecto a fantasmas y apariciones en San Juan y Miraflores.



Miraflores Fantasmal
Este moderno y hoy progresista distrito casi ha sido erigido sobre los antiguos campos de batalla y también tiene, entre sus aún existentes casonas del siglo XIX, innumerables historias acerca de las batallas por la defensa de Lima y el posterior saqueo y destrucción por parte del ejército invasor chileno, del antiguo Miraflores, por lo que es muy frecuente aún poder rescatar testimonios de apariciones fantasmales y presencias del siglo XIX.

Una de las más conocidas, es la que se relata acerca de la intersección de las actuales Avenidas Larco y Benavides; en ese lugar, como en toda la añeja Miraflores, existía una casona de la época de bonanza del guano, la cual –según cuentan los miraflorinos viejos-, siempre estuvo siempre rodeada de cierto halo misterioso. Sus ventanas cerradas y sus cortinas corridas, reforzaron esa imagen y dieron alas a la imaginación popular. Más aún en los últimos tiempos cuando muy rara vez alguien veía salir a sus moradores.



Fue en las inmediaciones de ese lugar, donde se produjo durante la Guerra del Pacífico un episodio salvajemente cruento protagonizado por la soldadesca invasora contra patriotas peruanos. Se cuenta que los miembros de una patrulla peruana, casi niños, capturada por el enemigo, fueron sometidos a todo tipo de torturas. Entre otras salvajadas les arrancaron las uñas de las manos y los pies. Masacrados y amarrados los anónimos defensores de la línea de Miraflores fueron abandonados por sus crueles verdugos y hallaron la muerte mientras proferían terribles gritos de dolor. Los invasores acababan de ensañarse con el pueblo de Chorrillos y la batalla de Miraflores era inminente. Esa es la historia conocida en Miraflores, y la que daba pie a considerar al lugar como embrujado.



Ya en 1977, y muerto su antiguo propietario, un descendiente suyo, de apellido Azula, derruyó la vieja construcción, para erigir un edificio de 5 pisos, denominado “Edificio Azula”; apenas se inició dicha construcción, las historias se multiplicaron.

Primero fueron los obreros encargados de la construcción y los vecinos: numerosas llamadas telefónicas y comentarios de personas que vivían en las inmediaciones de la obra, dan pábulo a las historias tenebrosas que se cuentan y refuerzan la versión que habla de ánimas y sucesos extraños: también se supo de algunos asustados obreros, amenazados de despido, si daban a la prensa su sincera opinión.

Ya concluída la edificación, los testimonios no cesaron: Jorge Cruz, antiguo administrador del cafetín “Claudia”, ubicado en aquel entonces el primer piso del edificio “Azula”, declaró que él particularmente no creía en fantasmas, pero confirmó las historias que se tejían sobre la vieja casona. “He oído hablar a personas que decían que en la madrugada aparecía un muchacho sin cabeza, pero lo que si puedo dar fe es de los ruidos extraños que sostengo haberlos escuchado”.


Una interesante versión, fue dada por un vecino de donde estaba ubicado el edificio “Azula”, y que vivía en el lado opuesto del edificio en la Av. Benavides. Félix Gómez, estudiante de arquitectura que no obstante advertir que conoció a la familia Azula y que jamás supo de fantasmas en su casa, dijo: “Mi cuarto está en el segundo piso y da al edificio. Desde las once de la noche, cuando me pongo a ver televisión, hasta el cierre de la programación he escuchado sonidos extraños como si alguien estuviera elevando algo o provocando desorden. Hasta la madrugada pueden oírse esos extraños ruidos...”

Hoy el “Edificio Azula” tampoco existe: dio paso al que primero fue denominado “Edificio Las Américas” y que hoy es el modernísimo “Hotel and Suites Las Américas”, de 18 pisos de altura. De sus pasadas presencias fantasmales, poco se sabe: para algunos, los fantasmas “desaparecen” cuando el lugar donde se manifestaban, también desaparece,… pero para otros, no,…



Es prácticamente imposible encontrar un pedazo de Miraflores que no haya sido construido en terrenos donde la historia tuvo lugar; como el caso del antiguo Cine “Leuro”: durante la década del sesenta el cine era una de las salas preferidas de la muchachada miraflorina. Ese cine es ahora una cosa del pasado que solo viene a la memoria cuando alguien repara en el nombre que identifica a un viejo edificio de la cuarta cuadra de la Av. Benavides. Los vecinos del edificio “Leuro” aún recuerdan con nostalgia al cine del barrio, pero no dudan de que los hechos misteriosos que ocurrían en su interior, desaparecieron también cuando fue demolido.

Cuando conversamos con un señor que dijo vivir en el tercer piso, pero que se abstuvo de revelarnos su nombre, nos relató que durante las funciones nocturnas las sillas traqueteaban solas como si alguien las moviera... pero no había nadie que lo hiciera. Ese fenómeno explicaba el porqué solía estar vacío el cine en las funciones de noche.

Son decenas más bien los testimonios de los habitantes de las viejas quintas aún sobrevivientes en Miraflores, Chorrillos y Barranco que tienen características casi idénticas: ruidos, lamentos y apariciones fugaces, las cuales aparecen de pronto en el lugar, cuando al realizar alguna obra de refacción, aparecen restos humanos o desconocidas tumbas, de la época de la guerra del pacífico.



San Juan embrujado
San Juan es una zona en la cual, al haber sido más bien un campo de batalla en toda regla, cuenta con historias fantasmales un tanto distintas a las anteriores: una de las más conocidas es la de la “viuda negra”: esta aparición correspondería a mujer de la alta sociedad limeña del siglo XIX que al perder a su esposo en la batalla de San juan de Miraflores, solía salir todas las noches en busca del cuerpo de su amado: ellos recien se habian casado, y la muerte de su amado llevó a la locura a la mujer. Se dice ya en siglo XX, que esa mujer ha sido vista en las pampas de San Juan con un vestido de traje largo y de color negro; igualmente, automovilistas declaraban haberla visto por la Panamericana sur y que muchos personas que la vieron enloquecieron,…

Finalizaré este recuento fantasmal con una historia familiar: una tía mía fue de entre los primeros pobladores de San Juan, en la década de los ‘60s; como toda nueva urbanización, y siendo una de las primeras pobladoras, ella y su familia tuvo que pasar por un tiempo viviendo prácticamente en medio de una pampa casi desolada: “…en aquel entonces, mi esposo era Guardia Civil,… “ –recuerda-, “… y cuando le tocaba guardia de noche, yo me quedaba sola en casa: apenas habían casas construídas y yo me moría de miedo pasando ahí sola, las noches. De rato en rato, miraba por la ventana, esperando que mi marido regresase ya. Una noche, vi pasar un grupo de guardias a caballo: lo primero que pensé al verlos fue “¡qué hermosos caballos!” (en aquel tiempo, era frecuente, ver a la entonces Guardia Civil, realizando guardias nocturnas a caballo); “…así, todas las noches veía pasando a los jinetes por las madrugadas”.




“Pasada una semana, conversé con una de mis pocas vecinas del barrio: me dijo “¡me voy a ir de aquí: no puedo dormir. Toda la noche escucho cascos de caballos y al salir a ver, no hay nada!!!” Le iba a responder que yo sí los veía, pero,… “algo” hizo que me callara,… no sé,… a partir de esa noche, empecé a ver con más detenimiento a los jinetes que pasaban”.

A pesar de ser mi tía una mujer de muy pocos estudios, comenzó a notar diferencias; y reforzó esa percepción, al revisar los textos escolares de sus sobrinos: “… los uniformes no eran de la Guardia Civil” (según su testimonio, eran uniformes chilenos),… poco a poco, me dí cuenta de que esos jinetes no eran de este mundo”,…

5 comentarios:

  1. Es muy interesante estas historias de fantasmas, pero como dice estos lugares fueron teatro de acciones militares. Aqui en Chorrillos en las cuadras que van desde la escuela militar hasta el morro parece que se ha visto a un mismo fantasma pues todos los que han experimentado esta presencia lo describen de la misma manera un hombre vestido de saco y chaleco de color blanco, elegante con sombrero de alas anchas, unas veces saluda amigablemente otras con furia, incluso tambien un fantasma con la misma descripción se ha visto en una casa en Villa Maria por la calle Progreso cerca de la comisaria de Villa Maria.

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  2. Gracias por tu colaboración, Rolando: espero que te animes a seguir colaborando con este blog para así conocer más historias de la Lima embrujada, ¡enhorabuena!

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  3. Muy interesantes apreciaciones, es cierto, en toda la zona circundante a los reductos (San Antonio y parque central de Miraflores) se luchó casa por casa empleando los parapetos y tapias como puntos defensivos. Particularmente yo vivo en la Calle Narciso de la Colina, frente a Saga y efectivamente la actividad paranormal es fuerte de noche. Ruidos, sensación de presencia humana, cosas que cambian de lugar y demás. Espero se pueda investigar o testimoniar aún más este tema.

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  4. Gracias por tu aporte, Social, y espero que te animes a enviarnos una colaboración con los testimonios de la actividad paranormal en la zona. Saludos

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  5. buenas tardes amigos y compatriotas yo vivo en chile hace 14 años y bueno gracias a ustedes pude culturisarme porque no sabia mucho de la historia de la guerra del pacifico bueno ahora medoy cuenta en muchas cosas de la realiadad bueno no me quejo de este pais porque en todos lados hay gente buena y gente mala y en este pais tengo formada la comunidad peruana en chile somos la comunidad mas grande casi de toda sudamerica en el extranjero y mi me paso caso lo mismo pero en este pais y tambien en trujillo sobre ver caballo blancos con personas de blano bueno son cosas inespiblables pero bueno viendo estos acontecimientos gracias a dios todo se vive en paz y una gran pena por la gente que sufrio en esa epoca muy bueno y que dios les bendiga a todos amigos y compatriotas

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