Publicidad

viernes, 17 de enero de 2014

Multitud abandona casa del brujo “Tití” en Verón al ver que no resucitó


La multitud que abarrotó la casa de Rafael Lidiano (Tití), el brujo más famoso de Verón, Punta Cana de Higüey, comenzó a retirarse la tarde de este jueves de la residencia, al ver que no resucitó como le prometió a familiares y clientes fieles a sus prédicas budistas y de sortilegios.

A medida que pasan las horas cada vez más se va quedando sin gente la casa, que ahora solo es visitada por familiares y los vecinos más cercanos.

Se recuerda que “Tití”, como era conocido ampliamente el hechicero, murió el pasado fin de semana y sepultado el lunes en medio de un ritual lleno de realismo mágico, envuelto en “loas” a los seres, toques de trompetas y baterías, y salpicado de whisky y clerén.

La comunidad dominico-haitiana residente en Villa Playwood, Verón, rindió el último adiós a los restos mortales de Rafael Lidiano, “El Brujo Tití”, considerado el más famoso y adinerado de la zona turística.

El sepelio más que una ceremonia fúnebre se convirtió en una fiesta de palos, donde las “montaderas” y las invocaciones a los espíritus que realizaban sus seguidores y familiares más cercanos, matizaron el folklórico entierro.

Muerte rara

Para familiares y creyentes de las manifestaciones mágico-religiosas, “la muerte de Tití fue misteriosa, murió como un pajarito, pese a aplicarse sus propias medicinas curativas”.

El Brujo fue declarado muerto, pero no fue enterrado hasta bien entrada la tarde del martes, porque sus familiares estaban esperando que reviviera a la media noche del martes o ayer miércoles.

Creen está vivo

Para los fundamentalistas de la religiosidad popular, el misticismo y la hechicería, su supuesta resurrección tuvo lugar el pasado martes, a las 12:00 del mediodía.

Andrea Henríquez, que se consideró la mejor vecina del difunto brujo, dijo que exactamente a las 2:15 de la tarde de ese día, el brujo llegó caminando a su residencia, con su aspecto normal y vestido con su traje negro, tal como fue enterrado, pero estaba descalzo.

“Lidiano saludó a todos los vecinos que estaban en su casa, “aunque no habló con nadie, entró y fue directamente a su altar, donde duró como cinco minutos haciendo musarañas, cogió algunas cosas que tenía que coger de su altar y luego desapareció”, sostiene con pasión desbordada la mujer.

Tanto Henríquez, como Jaison Bautista Luna, María Pier y la que todos llaman “La Cocinera”, testificaron que cientos de personas lo vieron vivo y caminando, el martes.

Yolanda Lidiano, hermana del fallecido, informó que su hermano murió muy joven, ya que al momento del suceso apenas contaba con 35 años.

Entre lágrimas y sollozando dijo: “Yo quería mucho a mi hermano, que era una persona muy buena y siempre me llamaba con cariño para hablar conmigo, y ahora no tengo a nadie que me llame ni que me ayude en el país, y no sé que voy a hacer”.

Murió en el hospital

El brujo murió en el hospital de Higüey, donde fue llevado con fuerte dolores de cabeza y estómago, tras tomarse una pócima o brebaje preparado por el mismo.

“Fui a verlo y de ahí en adelante no volvió a reaccionar más”, dijo su hermana, para más adelante agregar que “creo que a mi hermano lo mataron por envidia porque estaba progresando mucho”.

Al brujo Tití le sobreviven sus hijos Eriberto, Leonel y Rafael, que creen también que la muerte de su padre fue provocada, aunque no explican por qué y con qué.

Lo cierto es que ahora Rafael Lidiano o el “Brujo Tití” pasó con su muerte a ser una leyenda de la religiosidad popular en la zona Este del país, muy particularmente de Verón, Punta Cana de Higüey.

(FUENTE: elnuevodiario.com.do)

No hay comentarios:

Publicar un comentario

LinkWithin

Related Posts with Thumbnails